martes, 10 de marzo de 2009

ESTO ME LO ENVIO MI HERMANO Y QUIERO COMPARTIRLO CONTIGO

A MI HERMANA EXCEPCIONAL
Compartimos jugos, sonrisas y lagrimas;
De vez en cuando discutíamos,
Pero siempre nos rconciliábamos.
Existen en mi vida muchas personas,
Pero no hay ninguna otra
Que comparta ese lazo tan espcial
Que nos une desde la infancia
Tu eres la que siempre me escucha,
En mis más duros momentos, tu eres conmigo,
Siempre a mi lado en las buenas y en las malas
En fin tu eres mi mjor amiga.
Si tienes un hermano o una hrmana, no pierdas la oportunidad de decirle lo especial que es para ti.

miércoles, 4 de marzo de 2009

AÑOS EN SERVICIOS

NUESTRA QUERIDA

MIRIAM VALDEZ

El Domingo 1 de Marzo cumplio 33 años de prestar sus servicios ,con dedicación y esmero, a esta COMUNIDAD LASALLISTA

GRACIAS POR SER PARTE DE ESTA GRAN FAMILIA

VAMONOS PARA EL CONGRESO

Los días 20 - 21 - y 22 de Marzo
En la Casa San Pablo
Costo RD$1,000.00 (incluye comida)
Alojamiento en la casa San Pablo RD$500.00 p/noche (no incluye desayuno ni cena)


!ANIMATE!

G R A D U A C I O N

GENARO INFANTE SANTOS
ESPECILLISTA EN MATEMATICA APLICADA A LA EDUCACION
MUCHOS EXITOS

martes, 3 de marzo de 2009

EL RINCONCITO DE DIOS


SUAVIDAD

PROVERBIOS 16:24 Los dichos agradables son un panal de miel; dulce al alma y una curación a los huesos.

A nadie le gusta que le griten o traten mal: Por naturaleza hemos sido formados para ser tratados bien. Lamentablemente, en nuestra sociedad, encontramos personas que dondequiera que están reparten latigazos con su lengua lastimando a los oyentes. Esto sucede a menudo en la familia, en el trabajo y hasta en la iglesia. Esto nos pasa a nosotros, en momentos de tensión, donde no medimos las palabras y lastimamos aún a los seres que amamos.

La Biblia nos dice que las palabras suaves son dulces como un panal lleno de rica miel, y que ellas suavizan el alma y son un remedio a los huesos. Hacer lo contrario implica lastimar el alma y enfermar los huesos. Antes de hablar hagamos un alto y midamos la calidad de nuestros dichos, para saber si vienen cargadas de dulzura y bendición. De no ser así cerremos nuestra boca, porque lo que digamos destruirá al oyente.

CONFESION DE FE:
MIS PALABRAS SALEN DE MI BOCA CON LA SUAVIDAD DE DIOS Y PARA BENDECIR AL OYENTE.

ORACION:
En este momento renuncio a todo vocabulario perverso y dañino que ha gobernado mis palabras. Señor, produce un cambio de “clima” en mi lenguaje para que mis palabras sean dulces y un agente sanador para los demás. Hazlo Jesús para poder de esta manera glorificarte. Amén!


¡Dios Te Bendiga!